martes, 31 de mayo de 2011

IV BÚSQUEDA.


·         Péndulo
El autor nos menciona hay personas quienes regocijan de un neonarcisismo en el cual la primera persona nunca se termina de conjugar esto quiere decir (Primero yo, después yo y en tercer lugar yo) y debido a esto el vacío  no puede convertirse en un proyecto alternativo ya que siempre sentimos la necesidad de estar con alguien con quien poder relacionarnos.
Juliana González: “Se manifiesta en ese vacío moral, ese hueco, ese estado de suspenso, de oscuridad y confusión, de indiferencia”. Esto se trata de cómo sentimos la vida y de cual es la dirección o rumbo que tomamos en la misma medida que decidimos y actuamos, también se menciona que tenemos crisis por las cuales atravesamos, ya que el hombre mismo necesita una moral interior excelente ya que esta a su vez equivale a la autenticidad de la conciencia y a una buena ética y poder de decisión.

·         El gran ordenador
Aquí se nos menciona que las personas que son creyentes ya no razonan, ya que el pensador ejerce su derecho de creer, pero la creencia ya no pertenece al mundo secular del raciocinio. Se menciona que la ciencia desvía desplazar al pensamiento mítico y religioso en beneficio de la humanidad. Las pasiones religiosas han sido y son todavía la mayor fuente de violencia, de guerra, de muerte, debido a esto se dio por sentado que el bien estaba del lado de la ciencia y que por lo tanto ella triunfaría. Pero a su vez la religión se oponía al avance científico.
Rusell considera a la religión como “Una enfermedad nacida del miedo, y como una fuente de indecible miseria para la raza humana”.

·         La popularidad de dios
En México, uno de cada tres ciudadanos cree en la existencia del infierno y del diablo, ellos guían sus vidas cotidianas siguiendo esas creencias. La palabra creencia nos abre a toda una forma de interpretación de los hechos que ha sido explorada de manera sistemática. Las creencias viajan con nosotros, están dentro de nosotros y en muchas ocasiones ni siquiera somos concientes de creer en algo, es decir, no somos conscientes de haber hecho nuestra una creencia.

·         Misterios ¿más o menos?
La palabra misterio tiene una clara connotación religiosa. Se trata de un asunto arcano o secreto que debe permanecer así. En el cristianismo la implicación es todavía más evidente: es un fenómeno inaccesible a la razón, que debe ser objeto de fe, no se puede pretender entendimiento solo hay dogma. Además de los misterios surge otra consecuencia con el avance de la ciencia y del conocimiento que también puede tener un impacto en la religiosidad, esto es la multiplicidad de fenómenos sin explicación terrenal.

·         Perplejidad
Esta es una de las puertas de entrada a las grades discusiones, a los grandes dilemas que las religiones resuelven con dogmas.

La ciencia y la religión son reinos diferentes: La ciencia explora la naturaleza con su lenguaje. El reino espiritual no puede ser explorado con lenguaje científico, tiene que  ser examinado con el corazón, la mente y el alma.

·         Espejismo o delirio
Robert M. Pirsig. “Cuando una persona sufre de espejismo o delirios es un enfermo mental, cuando muchas personas sufren de espejismos o delirios, se llama religión”.

·         Naturalizar el espíritu
Habermas propone “naturalizar al espíritu” a través de cambiar, las actitudes cognitivas que los ciudadanos religiosos deben adoptar en su trato cívico con quienes profesan otras religiones y con quienes no profesan ninguna.
El respeto de los ciudadanos laicos por los creyentes se basa en una actitud de conocimiento, y debe ser lo mismo a la inversa. Habermas insiste en algo muy delicado para los no creyentes: aceptar que hay cierta racionalidad en las religiones. Las religiones con para Habermas también una formad e comprensión del mundo y para los no creyentes no pueden descartar de entrada quienes profesan  una fe. “Todas las religiones forman parte de la historia de la razón misma”.

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